Comenzamos nuevo mes y este año, igual que los junios pasados y, ya es casualité, pasan cosas. Hay infortunios y sinsabores que llegan sin ser llamados y quedarán hasta que decidan partir ellos mismos. Sigo fuerte y con ánimo pues, casi todo se puede arreglar y no vale la pena llorar por lo que no lo merece. Así que seguimos en modo ON.

Si hay un producto al que le tengo cariño. ese es la castaña. Gracias a la IGP Castaña de Galicia, cada vez está más desestacionalizado su uso y consumo. Tenemos la suerte de poder disfrutar de las castañas durante todo el año y, bien que se agradece. Además, para la dieta sin gluten es fantástica por los innumerables platos que podemos realizar con ella.

Unos ricos creps con super sabor a castaña es lo que me apetecía probar y estos no me han defraudado nada, nada. Siguiendo las premisas de rápido, fácil y rico, triunfaréis sin duda en cualquier momento.

El relleno es una crema de castaña y ricotta que se hace en un santiamén y podemos pedirle ayuda a los peques de la casa ya que no necesitamos calor para hacerla.

INGREDIENTES:

• 120 gr de harina de castañas (optad siempre por harina de castañas gallegas)

• 2 huevos

• 90 ml de agua o leche

Para la crema:

• 120 gr de harina de castañas (recordad, gallega es fantástica)
  

• 180 ml de agua

• 60 ml de nata líquida (yo siempre uso Feiraco)

• 1/2 cucharada de miel (yo he usado la riquísima miel de La Colmena de Sofía)

• 90 gr de queso ricotta

Frambuesas y chocolate para decorar

ELABORACIÓN:

Batir los ingredientes para hacer la masa de los creps y dejar reposar unos 20 minutos.

Para hacer la crema de castañas combina la harina con el agua, la nata líquida y la miel. Tápalo con film y refrigera para que coja cuerpo.

Añádele el queso ricotta y mezcla bien.

Ahora sólo nos queda hacer los creps en una sárten bien caliente y untada con un poco de mantequilla. Vierte un poco de la masa y reparte por toda la superficie para que quede uniformemente cubierta. Deja un par de minutos y dále la vuelta. Retira a un plato y sigue con el resto de la masa.

Para emplatar, cubre los creps con la crema y dobla en forma de triángulos.

A mi me encanta la mezcla del chocolate con la castaña así que he fundido un poco en el microondas y he trazado unas líneas por encima de cada crep.

El toque fresco y ácido lo aportan las frambuesas que me rechiflan con creps.

Espero que os gusten y los intentéis. Recordad que son #singluten por lo que podéis compartirlos con vuestros celíacos favoritos.

fuente receta: C. Kocinski